Mariluz Zolle – La formación, herramienta clave para dar respuesta las nuevas tecnologías

17/06/2020

La formación se convierte en una herramienta clave para dar respuesta a estas nuevas demandas mediante la incorporación al mercado laboral de profesionales con los conocimientos y competencias necesarias.

1. Papel de la formación en tiempos de recuperación

La formación en esta etapa post covid de recuperación económica y vuelta a la “nueva normalidad” se convierte en un factor fundamental.

Hay personas que todavía se encuentran en situación de suspensión (o reducción) temporal de empleo, ERTE, lo que les permite disponer de cierto tiempo que puede emplearse en el propio desarrollo y la adaptación a las nuevas demandas laborales. Para ello se oferta un importante número de cursos subvencionados por las distintas Administraciones, para ayudar a los ciudadanos a impulsar su conocimiento y por extensión su empleabilidad. En nuestra opinión, todo subsidio debería ir asociado a un proceso formativo al objeto de incrementar o la empleabilidad o las capacidades y cualificación de los trabajadores.

Por otro lado la nueva realidad que se vive en nuestro país, y la situación de crisis que lleva aparejada, exige profesionales formados y que destaquen en materias y temáticas que van a ser muy demandadas en este tiempo: competencias digitales (no olvidemos el boom de todo lo que ha supuesto la tecnología y virtualidad y que se va a mantener en ámbitos laborales, formativos, comerciales, de atención, asesoramiento…); la seguridad, ya sea a nivel informático pero también ciudadana, sanitaria…; el cuidado y atención a los demás: desde aspectos sanitarios, cuidado de mayores y personas vulnerables a temas sociales, medioambientales, etc.

La formación se convierte en una herramienta clave para dar respuesta a estas nuevas demandas mediante la incorporación al mercado laboral de profesionales con los conocimientos y competencias necesarias.

2. Debate formación online / formación presencial

Desde hace tiempo asistimos al debate entre ambas metodologías intentando decidir cuál de las dos es más eficaz en el entorno de la formación para el empleo.

En nuestra opinión es un debate ficticio dado que ambas pueden coexistir (y de hecho conviven) de forma perfectamente eficaz en los diferentes proyectos que se ejecutan en nuestro país.

Es cierto que la elección de la metodología más adecuada ha de responder a un análisis riguroso del proyecto en sí mismo: contenidos y materias del curso, perfil del alumnado, extensión geográfica en la cual se ejecuta el proyecto, aplicaciones tecnológicas necesarias, realización de trabajos y actividades prácticas… De este trabajo en profundidad se debería concluir el modelo más oportuno y adecuado siempre bajo criterios de excelencia en cuanto a la  calidad e innovación en el producto formativo.

Por otro lado es interesante destacar que la pandemia que hemos padecido recientemente ha puesto en valor una metodología no tan utilizada hasta ahora: la formación a distancia síncrona, la que se genera en un aula virtual en la que se convoca al alumnado y al docente para que interactúen en directo y comunicados a través de una plataforma tipo zoom, teams, skype, etc. Este modelo reúne ventajas de la formación online – el alumno no se desplaza, no se requieren instalaciones, permite contar con docentes expertos independientemente de su localización- y de la formación presencial, interactuación directa, aportaciones del alumnado y enriquecimiento del curso, formato dinámico, adaptación a las necesidades del colectivo.

En cualquier caso la innovación continua y la aplicación de herramientas tecnológicas en el ámbito formativo es una clave para el éxito de los proyectos y de las metodologías empleadas, independientemente de que sean online (síncrona o asíncronas) o presenciales.