“El arraigo por la formación facilitará la residencia a miles de personas formadas y cualificadas para cubrir las necesidades productivas de nuestro país”

Juan Antonio Sánchez Corchero
Presidente de la Fundación Aspasia

• El 10 de junio la Fundación Aspasia ha presentado públicamente su último informe “Arraigo por Formación. Aflorar talento oculto, que impacte positivamente en la mejora del mercado laboral. Derecho a la educación y trabajo digno”, un esclarecedor análisis sobre la aplicación, los desafíos y la realidad social sobre la que impacta esta medida de regularización y mejora de la calidad del empleo.

• Voces de personas expertas en mercado laboral y educación de todos los sectores aportaron su visión sobre esta medida que vincula a la formación y al empleo y que favorece la igualdad de oportunidades a la hora de conseguir un puesto de trabajo digno y regulado en los sectores de mayor demanda actual.

• Por encima de los retos de la aplicación de esta norma, posibles contradicciones y vacíos legales, así como la necesaria coordinación entre las distintas administraciones, está la mejora de las condiciones de vida y de estabilidad profesional de las personas migrantes, ya que 1 de cada 3 personas extranjeras están en riesgo de exclusión social severa.

Madrid, 10 de junio de 2024.- En los próximos 30 años harán falta 24 millones de trabajadores migrantes para sostener el sistema de pensiones, según las últimas declaraciones del Director General de Economía y Estadística de El Banco de España. Los flujos migratorios supondrán una ganancia neta poblacional de casi 10 millones de personas hasta el año 2053, de los cuales el 70% estará en edad de trabajar.

Medidas como el Arraigo por la Formación (BOE núm. 179, de 27 de julio de 2022) quieren dar respuesta a medio plazo a esa necesidad del mercado productivo y económico que atañe no solo a España sino a toda la Unión Europea. Y en el corto plazo cubrir el déficit de empleo de determinados sectores y a la vez facilitar la regularización de personas migrantes que llegan a nuestro país, asegurándoles una vida digna y el acceso a derechos fundamentales como la educación o la salud. La formación se convierte de este modo en una vía de inclusión e integración laboral en el mercado actual integrando otras variables clave como son aprendizaje permanente, el impacto de la transición ecológica y digital en el empleo y la igualdad entre hombres y mujeres, que se ve especialmente afectada entre estos colectivos en situación de vulnerabilidad.

Puesto que el trabajo es el principal factor de integración social en la edad adulta, el arraigo por la formación quiere promover trabajos más estables y de mayor cualificación a los que se pueda acceder en un espacio de tiempo más corto.

La Fundación Aspasia en el marco de su compromiso con el desarrollo laboral, económico y empresarial en España y con especial foco y dedicación a personas en situaciones de vulnerabilidad a la hora de encontrar empleo, ha publicado este informe y lo ha presentado en un acto público al que acudieron medios de comunicación, así como responsables institucionales, asociaciones de migrantes, Fundaciones, ONG y expertos y expertas en educación y empleo.

El Informe recoge una reflexión y un análisis desde diferentes perspectivas. La de la Administración Pública que ha de gestionar la medida, con un artículo de Gerardo Gutiérrez, director general del Servicio Público de Empleo (SEPE). La de la parte social con dos artículos, uno de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) de Jorge Martín; y otro, del Foro de la integración social de la inmigración (FISI), que aporta su vicepresidente Vladimir Paspuel, presidente de la Asociación Rumiñahui; unas consideraciones adicionales a tener en cuenta con la medida, aportadas por Begoña López Cuesta de la Fundación Aspasia, y para terminar con un análisis extenso y riguroso del marco legal, realizado por la jurista Menchu López; y el marco estadístico de la mano de Matin Khakpour y Carmen Martínez, con los datos más recientes que sostienen la necesidad estadística de esta nueva medida de regularización.

Acercamiento en cifras a la realidad de las personas migrantes

Estos son algunos de los datos relevantes y recientes para conocer la realidad del arraigo en España. Fuente Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

A fecha 31 de diciembre de 2023, se registran 210.334 personas con autorización por arraigo inicial vigente. El 92% se encontraban en situación de irregularidad profunda.

En comparación con el año anterior, las autorizaciones iniciales por arraigo han aumentado un 68%. Destaca el notable incremento del arraigo familiar, con un crecimiento del 185% (86.204 personas) y el arraigo para la formación que cuenta con 23.097 autorizaciones en vigor a 31 de diciembre de 2023.

El tiempo medio en la irregularidad es de 2,9 años, 1,2 años menos que el año anterior. Las nacionalidades más representadas son Colombia (46.499 personas) y Marruecos (35.079 personas) con un crecimiento del 80% y 76%, respectivamente, en el último año.

El número de personas afiliadas a la Seguridad Social con autorización inicial de residencia por arraigo ha aumentado en un 30,4% en el último año, llegando a 126.573 personas a fecha de 31 de diciembre de 2023, el 60% de personas con esta autorización de residencia.

Dentro de las mujeres afiliadas a la Seguridad Social, el 38% trabajan como empleadas de hogar. Por otro lado, más de la mitad de los hombres afiliados se encuentran en los sectores de agricultura, ganadería, hostelería y construcción.

En lo que se refiere a Latinoamérica, Colombia, Venezuela y Honduras destacan por encima de cualquier otro país de origen. Los inmigrantes de estas tres nacionalidades suponen el 60% de los inmigrantes irregulares que proceden de esta región. En el extremo contrario se sitúan Bolivia y Ecuador, donde la tasa de irregularidad es prácticamente marginal.

La regularización de las personas migrantes que viven en España supondría este beneficio para las arcas públicas: 3.400 euros por persona trabajadora y año, lo que supondría un beneficio acumulado neto de entre 790 y 950 millones de euros por año. (Estudio de la Fundación por Causa).

Más allá de la aplicación de la norma

El informe hace a su vez un acercamiento más cualitativo a la realidad de las personas migrantes en España, recogiendo información sobre su estatus social, educativo y con un epígrafe especial para la igualdad entre hombres y mujeres.

Una de cada tres personas extranjeras está en riesgo de exclusión social severa, una proporción tres veces más alta que la de los nacionales. Además, la tasa de riesgo de pobreza en los hogares migrantes con menores a cargo es del 60%, para los hogares españoles del 30%.

En cuanto a la Formación Profesional la tasa de escolarización en FP Básica es 6 puntos superior en los alumnos extranjeros frente a los españoles, a medida que incrementamos el nivel educativo las tasas se van igualando hasta llegar al Grado superior donde la brecha es de 58% alumnado español frente al 35% extranjero, lo que pone de manifiesto las barreras que los segundos enfrentan para acceder a los estudios más avanzados.

La proporción de mujeres en el grupo de inmigrantes irregulares es del 55%. La edad media de los hombres es sensiblemente más baja de las mujeres de este grupo: el 20% de las mujeres migrantes tienen más de 40 años (en el caso de los hombres es un 7%). El 38% de las mujeres afiliadas a la Seguridad Social trabajan como empleadas de hogar.

Según Begoña López, coordinadora del estudio sobre arraigo para la formación: “pensar con una perspectiva de género en el empleo es también ofrecer oportunidades con la formación y capacitación de mujeres en situación de irregularidad administrativa de origen o sobrevenida para poder emprender su propio negocio, asociarse con otras o simplemente atreverse con el aprendizaje autónomo online para seguir creciendo y mejorando sus expectativas de empleabilidad”.

En definitiva, en palabras de Juan Antonio Sánchez Corchero, presidente de la Fundación Aspasia: “el arraigo por la formación no solo permitirá la residencia por estudios a miles de personas, que deberán cumplir con el compromiso de formarse, sino que también se podrán incorporar al mercado laboral con la formación necesaria para cubrir distintos puestos de trabajo. Por otra parte, también es una manera de hacer aflorar el talento oculto, hacer frente a la contratación irregular y precaria de las personas migrantes que vienen a España en busca de un futuro de calidad y digno para ellas y sus familias”.

Ver informe completo

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